Con el gélido frío del invierno nos cuesta creer en uno en el que no llevemos en el cuello una bufanda de lana. Para algunos, este complemento es indispensable para no coger frío, pero no solo eso, sino también para que nuestro look se vuelva más urbano. Sin embargo, algunas veces llevar una bufanda nos resulta una tarea realmente incomoda, porque debemos enrollar y enrollar para que quede bien y desenrollar y desenrollar cuando queremos deshacernos de esta. Por suerte para todos los que son fan absolutos de las bufandas, llegan los cuellos, una tendencia muy invernal.
Los cuellos de lana comparten muchas similitudes con las bufandas, de hecho comparten las mismas características pero con una diferencia clave, y es que con el cuello no es necesario enrollar sino simplemente ponérnoslo directamente. Este detalle lo convierte en un complemento mucho más útil y cómodo, y su popularidad con el tiempo ha sido tal, que podemos encontrar actualmente más variedad en modelos de cuellos que en bufandas.
Hay quienes aprovechan la modernidad del cuello para optar modelos desteñidos, que combinan diferentes tonalidades de un mismo color en el cuello, que mezclan diferentes estilos de lana e incluso quienes se atreven por cuellos llenos de glitter. El cuello es una prenda versátil, apta para cualquier tipo de look y que con su comodidad consigue conquistar a los incondicionales de las bufandas e incluso a quienes mostraban reticencias para llevarlas. Además, el cuello suele tener una amplitud mayor, lo que para muchos es un desahogo o mejor dicho, una característica definitoria que gana adeptos.
Además de sus ventajas particulares, el cuello como cualquier otro complemento, ayuda a mejorar indudablemente nuestro outfit, aportando distinción y lo que es mejor, a un precio bastante reducido. Quienes se atrevan a crear un diseño exclusivo pueden tejer su propio cuello de manera fácil y sencilla, quienes no tienen tanta maña, siempre podrán optar por los diferentes modelos que nos ofrecen las tiendas de moda actual y que mantendrá a nuestro cuello a salvo de catarros con un accesorio de lo más chic.